En el artículo de la semana pasada, vimos que es posible que tu profesión ideal no se limite a una única posibilidad, que ahora mismo aún no has podido descubrir, sino que es probable que existan varias posibilidades, a priori sin relación ninguna entre sí, que harán que te sientas realizado. Si te perdiste el artículo, puedes leerlo aquí.
Además, vimos que una vez que has conseguido identificar varios rasgos de tus diferentes identidades profesionales, tendrás que enfrentarte a la difícil tarea de tomar una decisión sobre lo que deseas hacer a continuación.
Y aquí es donde la gran parte de las personas generalistas tienen un problema.
Generalistas o Scanners – ¿por qué les resulta tan difícil elegir una profesión?
Hasta hace poco, me costaba entender por qué algunas personas podían estar tan seguras en el momento de tomar decisiones importantes, sobre todo relativas a su profesión y a su modo de vida, mientras que a mí me costaba horrores llegar a una conclusión que me convenciera al 100%.
Como escribí en este artículo sobre las diferencias entre especialistas y generalistas, hace un par de años mientras intentaba decidir cómo cambiar de profesión y elegir un camino que tuviera más sentido para mí, llegué a la conclusión de que no quería elegir un solo camino y especializarme en él. Quería ver mucho más, vivir más vidas y no dejar pasar oportunidades.
Recuerdo que en ese momento iba en el tren de camino a París y escribí en el reverso del ticket: “me niego a elegir un solo camino. Puede que nunca llegue a ninguna parte haciendo lo que me dicta mi corazón, pero al menos no viviré eternamente con la convicción de que me estoy perdiendo algo importante”.
Al igual que yo, las personas con tendencia generalista que se esfuerzan por elegir una sola profesión, un solo hobby o un solo camino en el que volcar toda su pasión, siempre acaban sintiéndose descontentas y con la sensación de que les falta algo.
Barbara Sher, escritora y asesora profesional, bautizó a estas personas con el término de “scanners”, por su tendencia a vivir permanentemente escaneando su entorno para descubrir nuevas oportunidades.
En su libro Refuse to choose! Use all of your interests, passions and Hobbies to create the life and career of your dreams (“¡Niégate a elegir! Usa tus intereses, pasiones y hobbies para crear la vida y la carrera de tus sueños”), la autora analiza en profundidad los diferentes perfiles generalistas que existen en función de las inquietudes que les motivan a seguir cambiando, el tipo de retos que buscan y el tiempo que permanecen interesados por estos nuevos retos e identificó hasta nueve perfiles diferentes de scanners.
Aunque estos perfiles difieren unos de otros en algunos aspectos, en mi opinión se pueden resumir en dos grandes grupos:
1. Especialistas en serie
Los especialistas en serie disfrutan convirtiéndose en expertos en una profesión concreta o un hobby, pero sólo durante un tiempo determinado. Puede que su pasión les mueva a seguir aprendiendo en una rama determinada hasta conseguir dominar la habilidad, o que tras un determinado número de años simplemente necesiten un cambio, pero estas personas siempre necesitan la adrenalina o el gusanillo de volver a empezar de cero en algún momento; ya sea en su profesión o en su modo de vida.
Disfrutan enfrentándose a sus propios límites y retándose a sí mismos a dominar nuevas habilidades. Además, normalmente, una vez que han dominado la habilidad o han llegado al límite de su interés, los especialistas en serie consideran que ya le han sacado todo el jugo a ese tema en particular y no suelen volver a interesarse por él.
2. Grandes multitaskers
Por su parte, los grandes multitaskers nunca llegan a especializarse por completo en nada, porque necesitan estar siempre involucrados en una multitud de proyectos simultáneos.
Es posible que trabajen a tiempo completo como empleados, pero cuando llegan a casa siempre están ocupados en muchas otras actividades. O puede que trabajen de forma independiente en diferentes ocupaciones sin aparente relación, de modo que puedan poner en práctica varias habilidades a la vez.
También se engloban en este grupo las personas que tienen muchos hobbies diferentes, las que siempre están leyendo varios libros a la vez y empiezan muchas cosas pero sólo acaban las que verdaderamente les llaman la atención.
Ambos caminos tienen sus ventajas y sus inconvenientes.
Como especialista en serie, puede que te resulte más fácil concentrarte en tu profesión o en las actividades que realices. Además, avanzarás más rápido que un gran multitasker y puede que te llegues a convertir en un verdadero experto (aunque no sea durante mucho tiempo). Sin embargo, es posible que llegues a sentir frustración por estar perdiéndote otras cosas importantes si esta fase fura demasiado tiempo y que te cueste elegir qué profesión o actividad vas a realizar a continuación, una vez que has dejado de interesarte por la actual.
Por su parte, los grandes multitaskers suelen sentirse realizados porque su felicidad no depende de una sola profesión o de una sola actividad, sino que se reparte entre muchas opciones. Aunque estar permanentemente involucrado en muchos proyectos a la vez puede que te deje extenuado y que a menudo te sientas disperso y es probable que tengas que obligarte de vez en cuando a hacer pausas para no colapsar tu cerebro de información.
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Descubrir el libro para mí fue toda una revelación. Desde que decidí cambiar de profesión, mi principal objetivo se convirtió en encontrar una profesión que tuviera sentido para mí y que fuera lo suficientemente atractiva para mantenerme interesada durante las próximas décadas. La tarea me resultó muy difícil.
Barbara Sher habla de este problema en su libro y afirma que el principal problema de los generalistas o scanners, es que llevan oyendo toda su vida lo importante que es elegir una sola actividad y descartar todas las demás para poder llegar a alguna parte. Y como esto está en contra de sus instintos básicos, es probable que se acaben bloqueando y no sean capaces de elegir nada. Si nadie les hubiera dicho que tienen que esforzarse en elegir y descartar, lo más probable es que continuaran su vida haciendo las miles de cosas que siempre han hecho, felices y sin preocupaciones.
Durante el colegio, hay niños que disfrutan con casi todas las asignaturas, desde matemáticas a filosofía y que por las tardes están en diversas actividades extra-escolares, como deportes o ajedrez. Y son perfectamente felices, haciendo todo lo que les gusta y sin preocuparse de tener que descartar nada que les entusiasme. Los primeros problemas aparecen cuando alcanzan los últimos cursos y tienen que elegir una especialidad. Suele ser el momento en el que aparecen las primeras dudas.
En mi caso, antes de entrar en la universidad, pasé meses investigando decenas de posibilidades para mi futura profesión, sin sentirme particularmente atraída por ninguna en particular. Si me decidí a elegir una, fue simplemente porque cerraban los plazos para aplicar y desde entonces, hasta el día de hoy, nunca he estado del todo convencida de haber tomado la decisión correcta.
Al contrario que el especialista, que disfruta haciendo lo que se le da mejor y profundizando cada vez más en ello, es común que un generalista se sienta a menudo culpable por no haber encontrado la profesión de su vida o su vocación verdadera, y que llegue a creer que nunca podrá encontrar la felicidad ni sentirse realizado en su vida profesional hasta que lo haga.
Los scanners no pueden elegir una dirección. Es como decir a un padre que elija sólo un hijo para alimentar. No es posible. Un padre sabe que tiene que alimentar a todos sus hijos. Y un scanner debe encontrar una forma que le permita seguir todos los caminos que le interesen (Barbara Sher)
¿Preparado para ponerte en marcha?
Cuando decidí cambiar de profesión, aspiraba profundamente a tener libertad para trabajar en mis proyectos y formarme en la dirección que había elegido. Unos meses después, me cansé de tener tanta libertad y me concentré en conseguir un trabajo nuevo en la profesión para la que me había estado formando.
Los sueños cambian continuamente, sobre todo si tu deseo no es ser un gran especialista, por eso resulta tan importante no bloquearse y tomar decisiones rápidamente.
Lo que hoy te resulta apasionante, es posible que mañana te aburra.Pero nunca lo sabrás si no lo pruebas.
Las dos reglas más importantes para cumplir un sueño son: empieza en pequeñas cosas y empieza ahora. Para los generalistas, hay que añadir otras dos: ¡empieza todo y no te agobies por tener que acabarlo! (Barbara Sher)
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¿Te consideras un especialista en serie o un gran multitasker? ¡Comparte tu experiencia!
A mí me pasa; soy abogada,, pero no quiero dedicarme solo a eso,, el problema es que no sé ni por dónde ni cómo comenzar a dedicarme a otras cosas. A veces me siento estancada porque el Derecho no es mi pasión como lo son las artes y bueno, hay muchos factores que me detienen.
Hola Katherine, si sabes que te gustaría dar un cambio pero aun no sabes como orientarlo, te recomiendo que hagas los ejercicios gratuitos que están en la página de recursos. Como licenciada en derecho seguro que también hay muchas opciones que aún no te has planteado y que te pueden gustar y si deseas un cambio de 180º, entonces deberías empezar a trabajar para ver qué te podría ilusionar.
Un abrazo, Estela